Los líquenes son muy sensibles a la calidad del aire. Suelen vivir en comunidades muy antiguas de bosques que no han sido degradadas. Son muestra de la calidad del aire.

10.02.2023. Quintá de Cancelada. La Asociación Castaño y Nogal informa y traslada a los medios de comunicación como hecho nuevo singular la proliferación en castaños, robles, fresnos y frutales del entorno de la Ruta Quintá-Río Donsal y afluentes del Río Navia, Donsal y otros afluentes en el entorno de Os Ancares, en una altitud entre 450 y 700 metros, que antes no existía en tal cantidad y menos del tamaño y en altitudes de la fotos anexas.

Biólogos y técnicos forestales consultados por CyN refieren que los líquenes detectados puede ser de las variedades “Evernia”, “Parmotrema” y “Usnea” de talos gris claro, delgado, bastante liso y mal delimitado. Suelen desarrollarse sobre los troncos y ramas de los árboles autóctonos, bosques densos y sombríos, así como en rocas y zonas de matorral como algunos de los márgenes de la ruta del río Donsal.

Los líquenes recogen la mayoría de los nutrientes del aire, para después poder fabricar su propia materia orgánica. Los líquenes se aprovechan de las irregularidades presentes en la corteza del tronco y ramas de los árboles para tener cierta capacidad de agarre. Este es el motivo por el que los líquenes suelen proliferar en árboles de avanzada edad.

Los talos de los líquenes son de crecimiento lento y tienen formas diferenciadas (en forma de hoja) foliáceo, (en forma de corteza) crustáceo y (arborescente) fruticuloso. Son organismos multicelulares que crecen durante toda su vida, disponen de cloroplastos que tienen pigmentos que le propician la fotosíntesis y así transformar la energía solar en distintas formas de alimentos y producción de oxígeno.

Los líquenes como seres vivos absorben los contaminantes atmosféricos, con el efecto beneficioso que ello conlleva. En general, la presencia de una gran diversidad de líquenes, como la detectada el presente invierno en los sotos y bosques primigenios de Cancelada es indicativo de una buena calidad del aire, en este caso concreto, de la cuenca de los ríos Navia, sus afluentes, regatos y entono del Sendero Quintá – Río Donsal (PR-G 159). Si el ambiente se encuentra contaminado, los líquenes absorben esas sustancias nocivas, que en grandes concentraciones les causan la muerte. Este es el motivo por el que en zonas urbanas e industriales existe poca diversidad de líquenes. 

Por este motivo, el biólogo Rafael Rodríguez García del Centro Fonteboa de Coristanco no ve relación entre el aumento de la cantidad de líquenes, con el aumento de la contaminación atmosférica los gases liberados en los incendios forestales, como: óxidos de carbono, óxidos de nitrógeno y compuestos orgánicos volátiles.

Los incendios, son reacciones donde el oxígeno del aire reacciona con los compuestos orgánicos de la madera, produciendo su oxidación y liberando esos gases. Si aumenta la contaminación, se debería reducir la cantidad de líquenes. Por lo que este biólogo entiende que en la Comarca de Cancelada y entorno de las cuencas de los ríos Donsal, Navia y otros afluentes éste pasó todo lo contrario, en parte también porque en su entorno no se registraron incendios forestales estos últimos años.

Dicho biólogo y otros técnicos consultados por Castaño y Nogal consideran que los líquenes son muy sensibles a la calidad del aire, suelen vivir en comunidades muy antiguas de bosques que no han sido degradadas, por tal motivo, son indicadores de la continuidad ecológica y nos indica el grado de salud ambiental del lugar en que se desarrollan.

Los líquenes blancos que predominan en sotos de castaños y bosques de Cancelada modifican el paisaje invernal. Los técnicos consultados por Castaño y Nogal estiman que también podría ser debido a una deshidratación producida por las altas temperaturas y prolongadas sequias, sin descartar otras causas complementarias.

La proliferación del liquen detectado y fotografiado podría tener efectos beneficiosos en pro de la absorción de contaminación atmosférica, e incluso ser aprovechados para fines medicinales y alimenticios. Castaño y Nogal considera que los líquenes blancos y grisáceos de Cancelada podrían se base para proyectores de investigación sobre la diversidad liquénica de la zona.

Al respecto, en los últimos cinco años, directivos de la Castaño y Nogal detectaron en castaños del primer y segundo tramo del Sendero Quintá-Río Donsal con espacios ovalados remarcados con tinta azul en numerosos troncos de castaños relativamente jóvenes, con menos de ciento cincuenta años, sin que –al día de hoy- se sepa el fin ni la institución: administración, universidad, empresa o profesionales que lo promovieron e hicieron, incluso tras comentarios en sitios web y redes de CyN.

A modo de conclusión, es obvio que los bosques primigenios del entorno de la Ruta Quintá-Rio Donsal y afines han resistido –por ahora- los efectos de los incendios y de la falta de acciones públicas de conservación en estos territorios, lo que hace más meritoria la labor medio ambiental de Castaño y Nogal del período 2010-2023, además de los efectos paisajísticos, de dignificación y promoción del bosque autóctono de esta zona de la montaña lucense, atractivo de senderistas.

Contacto:

Antonio Álvarez González, presidente ACyN 696 908 135

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