El frío polar, el agua nieve y helada transforman los paisajes naturales de invierno de la montaña lucense y, en concreto, de Quintá de Cancelada y en la Ruta Quintá-Río Donsal, como nos muestran las fotos de Fe Álvarez que colgamos a continuación para el deleite de nuestros fans.
Los refraneros de antaño decían que «año de nevadas año de cosechas», con lo que ojalá que sea un año de buenas cosechas, si bien ahora la tierra y fincas cultivadas en Cancelada son pocas, pero aún quedan y pensamos que la crisis y el impulso pro-ambiental de Castaño y Nogal conllevará a que en los próximos años lo sean más, pues hay elementos para la producción de productos de calidad y la logística de distribución, que antaño no había.
Por lo que se ve, la nevada caída ayer y hoy en Quintá es más intensa de lo habitual, pues en aquella zona de media montaña apenas nieva y cuando lo hace dura muy poco a la altitud de 650 a 840 metros de altitud del punto más alto del Pico de Restelo, arriba de Coto, es un atractivo temporal y efímero para disfrutar de paisajes nevados, blancos y uniformes, sin los matices de diez verdes de la cuenca del río Donsal de otras épocas del año.
Que disfruten de las fotos de nuestra corresponsal.
Antonio Álvarez