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Según Juan Gérvas (Licenciado y Doctor en Medicina por la Universidad de Valladolid), ante la gripe A, debemos actuar con mucha tranquilidad y paciencia.gripe-a

A continuación reproducimos aquí, la carta abierta que este médico rural envía a la ministra y consejeros de Sanidad, con copia a sus pacientes.

ANTE LA GRIPE A, CARTA ABIERTA A LA MINISTRA Y A LOS CONSEJEROS DE SANIDAD

Con el debido respeto, ruego que escuchen a este médico general rural preocupado por el pánico desatado ante la epidemia de gripe A. Es preocupación clínica y social, pues se refiere tanto a la atención a los pacientes como al impacto en la estructura social, laboral y económica de un pánico que tendrá peores consecuencias que la propia epidemia de gripe A.

CONSIDERACIONES

Conviene recordar que el Gobierno de Canadá se planteó dos objetivos ante la gripe aviar, 1/ disminuir su impacto en mortalidad y 2/ mantener la estructura social. No es una visión improbable la de un país sumido en el caos, parado por cierres de escuelas y centros de trabajo, con las urgencias y servicios médicos colapsados, con falta de atención a otros problemas de salud incluso graves, como infartos de miocardio y apendicitis (sin hablar de los errores tipo retrasos en el diagnóstico de meningitis por confusión con la “omnipresente” y deslumbrante gripe A).

Y, sin embargo, la gripe A es enfermedad benigna, con menos mortalidad que la gripe estacional (la de todos los años). Lo sabemos ya con datos, por la experiencia del invierno en los países del hemisferio sur. La diferencia es responder como Argentina (pánico y descontrol absoluto) o como Australia (organización y eficacia). Según los cálculos más ciertos podemos esperar como máximo unos 500 fallecimientos por gripe A, frente a los más de 1.500 anuales por la gripe estacional. Por ello, habrá menos muertos en todos los grupos de edad con la gripe A que con la gripe estacional. Para disminuir la mortalidad habrá que tratar adecuadamente a los casos que se compliquen. Lastimosamente la vacuna prometida llegará tarde, y no deja de ser una vacuna cuya eficacia desconocemos. Hasta que no haya más conocimiento muchos ni nos la pondremos ni la recomendaremos.

Respecto a las embarazadas, siempre se han visto más afectadas por la gripe, especialmente en el tercer trimestre, por los cambios cardio-respiratorios que provoca la ocupación del abdomen por el útero grávido. La gripe A no cambia nada respecto a la gripe estacional; habrá la misma proporción de ingresos, y menos muertes que con la gripe estacional. La embarazada puede y debería llevar la vida sana que siempre se le ha recomendado, lo que incluye continuar con su vida normal, familiar y laboral. La gripe A no provoca abortos ni malformaciones del feto. Estar embarazada no aumenta la probabilidad de contagiarse por gripe A.

La selección de personas por sus “factores de riesgo” es cuestión discutible pues los factores de riesgo ni son necesarios ni son suficientes para explicar las complicaciones. Por ejemplo, hasta el 70% de los niños que mueren por gripe estacional carecen de factores de riesgo definidos.

La predicción sobre la evolución de la gripe A debería basarse en lo que sabemos de esta propia epidemia y de pandemias previas. Por ello lo previsible es una onda de rápido contagio. Hablar de otras posibilidades es ignorancia, fantasía, irresponsabilidad o maldad. Es absurdo recordar epidemias de gripes de cuando ni había una cobertura pública sanitaria ni existían antibióticos para tratar las neunomías que las complican.

PROPUESTAS

Dejen de organizar protocolos y de promover medidas de recepción a los pacientes de probable gripe A que carecen de sentido. Es absurdo el aislamiento en urgencias y en los centros de salud de los pacientes con fiebre y síntomas de gripe. Durante la epidemia los griposos estarán en todos sitios y las medidas de aislamiento son innecesarias en los centros sanitarios. Sólo contribuyen a crear alarma y pánico.

No promuevan el diagnóstico exacto de la gripe A, excepto para investigación y vigilancia epidemiológica. Las pruebas de detección rápida son poco fiables, e inútiles. El seguimiento es el mismo sea gripe A, gripe estacional, o cualquier otra infección respiratoria.

Dejen que los médicos clínicos hagan su labor. Llevan años atendiendo a los pacientes con gripe, y saben hacerlo en las urgencias, las consultas y los domicilios. Los “expertos” poco pueden añadir, salvo colaborar como consultores. La gripe A es más benigna que la estacional, pero concentrará a los enfermos en un periodo breve de tiempo. No conviene hacer grandes inversiones ni cambios, sino reforzar los dispositivos existentes con lógica y sentido común. La buena atención clínica a los casos complicados es tan importante o más que todas las demás medidas juntas. La atención a domicilio debería gravitar sobre los médicos de cabecera que tienen conocimiento y capacidad de decisión respecto a sus pacientes y su entorno familiar. Tengan en cuenta la sobrecarga de trabajo y prevean medidas para compensar las horas extras de trabajo (no todo es gastar en acumular anti-virales y vacunas).

No promuevan excesivamente ni los anti-virales ni la vacuna. Hay dudas razonables sobre sus ventajas, y tienen efectos adversos innegables.

Tengan en cuenta que la gripe A tendrá más impacto en la clase social baja, entre los pobres, marginados, toxicómanos, mal alimentados, mal abrigados y habitantes de viviendas insalubres. Todos ellos tienen menos interés por su salud por lo que habrá que prever medidas pro-activas tendentes a evitar la falta de equidad en la atención a estos pacientes y poblaciones.

No promuevan el uso de mascarillas. Su eficacia es dudosa.

Promuevan el auto-cuidado. Lo importante es que los pacientes y las familias se enfrenten a la gripe A con la misma serenidad y buen hacer que a la gripe estacional. El ser humano ha evolucionado en convivencia con el virus gripal, de forma que hay un excelente cúmulo increíble de normas sensatas de auto-cuidados en la población. Como siempre ante la gripe, los individuos y las familias son capaces de cuidarse sin necesidad de médicos ni de sanitarios.

Faciliten la justificación de la ausencia al trabajo. La gripe dura siete días, y normalmente los tres primeros son los peores. Nada impide que esos tres días se puedan justificar por el propio trabajador, sin necesidad de baja médica (con lo que se ahorra la visita al médico en el 95% de los casos, que serán leves). Y en caso de ausencia más larga, de hasta una semana, facilite la justificación de la baja con un solo documento que se pueda hacer en sólo una visita (según la organización actual se requerirían tres).

Pidan a los medios de comunicación que sean responsables. No tiene sentido transmitir en vivo y en directo cada muerte por gripe A. En vez de 500 parecerán 500.000. Con ello se crea alarma social innecesaria. Tenemos la experiencia de la meningitis C, que desató el pánico por este comportamiento absurdo de los medios de comunicación. La percepción social del riesgo de contagiarse y de morir por gripe A no tiene nada que ver con la realidad. Todos tenemos la culpa, desde la Organización Mundial de la Salud al Ministerio de Sanidad y Política Social, pasando por las Consejerías de Sanidad, los Colegios de Médicos y los medios de comunicación. Y entre todos hay que lograr enmendar este desaguisado antes de que sea tarde. Es clave que la percepción social del riesgo de enfermar y de morir por gripe A corresponda a la realidad, a la de una enfermedad leve, una gripe de menor gravedad que la habitual.

Juan Gérvas es médico de Canencia de la Sierra, Garganta de los Montes y El Cuadrón (Madrid). Profesor Honorario de Salud Pública en la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Madrid, y Profesor Visitante de Atención Primaria en Salud Internacional de la Escuela Nacional de Sanidad (Madrid).

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cartel

Teléfono de la gripe A: 902 400 116

El Ministerio de Sanidad también ha creado una página web con toda la información sobre la gripe A: informaciongripea

(Pare el reproductor de música para escuchar el video. Gracias)

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El virus de la gripe es un virus muy contagioso que parte de las aves, pasando con facilidad a otros mamíferos como el cerdo y de ahí a las personas. Si la persona infectada tose o estornuda, expulsa millones de partículas virales. Si uno respira esas partículas o toca la superficie donde han caído ya está contagiado.

Para hacer frente al virus están los antivirales (tamiflu, amantadina, etc) que deben ser tomados en los primeros momentos de la infección y antes de que se manifiesten los síntomas. Por eso la mejor estrategia preventiva es la vacunación. Pero el virus de la gripe tiende a cambiar muy rápidamente , por lo tanto la vacunación contra los virus de este año no suele ser válido para el siguiente.

Por lo tanto la elaboración de dicha vacuna es muy predictiva, igual que el pronóstico del tiempo. Un meteorólogo tiene una serie de datos sobre la atmósfera y gracias a ellos realiza una predicción sobre el tiempo que va a hacer al día siguiente. Pues un epidemiólogo de la gripe realiza una función similar. Se sabe que cada año, el virus se origina en Asia y entre los meses de enero y marzo se realiza la predicción de las tres cepas que van a ser las dominantes. Una vez seleccionadas se envían a los laboratorios que las van a elaborar.

Para crear la vacuna hay que hacer crecer el virus en células vivas y para ello se utilizan huevos de gallina embrionados. Resulta caro porque para realizar los millones de dosis necesarias se necesitan millones de huevos costando cada huevo 1,5 euros. El proceso de inoculación de cada huevo es un proceso manual, huevo por huevo.

Pasadas unas 48-72 horas se recoge el líquido amniótico. Una vez esterilizado hay que comprobar que los virus están “muertos”. Y ya para finalizar se realiza una mezcla de los componentes de las tres cepas y se prepara la dosis.

Todo ello requiere unos 6 meses de trabajo, es decir, hasta julio no se tienen dispuestas las primeras vacunas. Luego se requiere un par de meses para distribuirlas por el mundo. Por lo tanto, echando cuentas, las campañas de vacunación empiezan por octubre, 10 meses después de realizar la predicción.

¿Y qué está ocurriendo ahora con la actual pandemia de gripe? Muy sencillo, es un virus de la gripe que ha aparecido en un lugar no esperado (América no Asia) y “fuera de plazo”. Por lo tanto, con todo lo dicho, las primeras dosis no estarían disponibles hasta dentro de tres meses, no antes.

Sólo nos queda decir que esperemos que los antivirales sean efectivos, ayudados por la cuarentena. El tiempo lo dirá.

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Ver Gripe porcina en un mapa más grande

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La OMS señaló que esperará hasta obtener más informaciones para tomar nuevas medidas y advierte del potencial de pandemia de la gripe porcina

Ginebra. (dpa) – Tras calificar el reciente brote de gripe porcina en México como una «emergencia de salud pública a nivel internacional», la OMS señaló hoy que esperará por ahora hasta obtener más informaciones sobre la situación en varios países para tomar nuevas medidas, según un comunicado del organismo en Ginebra.

Varios expertos discutieron en una reunión extraordinaria del sábado los casos actualmente conocidos y todos los puntos que aún no están claros, indicó la Organización Mundial de la Salud (OMS). Por ello, es necesario recibir más informaciones, apunta también el comunicado.
Todos los Estados deben evaluar cuidadosamente los posibles casos de gripes poco habituales o infecciones pulmonares en su territorio antes de que se anuncien medidas que vayan más allá de las actuales, indicó la organización.
La OMS considera que el actual brote de gripe porcina tiene el potencial de una pandemia y la clasificó con la categoría tres en una escala que va del uno al seis, éste último como el grado de más alto riesgo para la salud internacional.
En casos de pandemias, es decir, cuando una enfermedad amenaza con propagarse a nivel mundial, la OMS puede recomendar medidas más estrictas como restricciones para el comercio y los viajes internacionales.

No puede ser contenida

Por su parte, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) han informado hoy de que la nueva cepa de la gripe porcina se ha extendido de tal forma que no puede ser ya contenida.
«Está claro que está extendida y por eso les hacemos saber que no podemos contener el contagio de este virus», ha indicado Anne Schuchat, del CDC, en rueda de prensa telefónica.

Viajeros con síntomas

Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) ha difundido las recomendaciones sanitarias para los vuelos procedentes de las zonas afectadas por el brote de gripe humana de origen porcino, entre las que destaca la «separación de viajeros que presenten síntomas relacionados con este tipo de gripe».

El protocolo, establecido por el Ministerio de Sanidad y Política Social, determina que ante una posible situación de riesgo relacionada con la gripe las aeronaves que se dirijan a las áreas afectadas deberán ir provistas de guantes, mascarillas y batas.

Asimismo, los vuelos procedentes de las áreas afectadas deberán proceder a la separación y aislamiento de los viajeros con síntomas relacionados con este tipo de gripe, como fiebre superior a 39 grados, tos, dolor de cabeza intenso, dolores musculares y de articulaciones, que serán atendidos por un solo tripulante provisto de medidas de protección personal.

Además, en el supuesto de que se detectara cualquier caso el comandante de la aeronave tendría la obligación de informar a la Torre de Control, lo que activaría la inmediata comunicación con el personal del Ministerio de Sanidad en el Aeropuerto.

Fuente: La Vanguardia y prensa digital

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